
La encontré en el jardín
Bajo ese viejo manzano
Sentada con un manojo de flores
En una pose envidiable
Pasamos un par de horas charlando
Entonces puso su mano entre mis piernas
Oh, pensé, debo estar soñando
No sabía que había caído en su trampa
Entonces me hizo decir cosas que no quería decir
Entonces me hizo jugar a juegos a los que no quería jugar
Era una ladrona de almas, me robó el corazón
Ladrona de almas, y me destrozó
Empezó moviéndose con gracia y soltura
Introduciéndose lentamente en mi columna
Exterminando esta sensación tan agradable
Ooooh, todas las que pudo encontrar
Y cuando me dejó vacío y desnudo
Es cuando me tiró al suelo
Sacó un cuchillo y lo hizo brillar delante de mí
Clavándomelo y dejandome abandonado...
No hay comentarios:
Publicar un comentario